El presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla, dijo en un evento que congregó a empresas eléctricas de la región que la inteligencia aplicada a la red debe tener el objetivo de lograr resultados concretos para la gente.
“Los intercambios energéticos se basan en ‘la norma de las tres R´: recursos, redes y reglas. Luego se agregó una cuarta, relaciones, y yo añado una quinta R que es resultados. Es en ellos que se ve la inteligencia al servicio de la gente”, dijo el presidente de UTE.
Casaravilla participó del I Simposio “Redes y Ciudades inteligentes”, organizado por la Comisión de Integración Energética Regional (CIER) durante los días 21, 22 y 23 de agosto. El evento propuso tratar el tema “Una Red Inteligente para una Ciudad y Ciudadanos Inteligentes” con el objetivo de reunir a las empresas electroenergéticas y a las ciudades latinoamericanas con proyectos inteligentes. El mismo contó con tres actividades que se desarrollaron en simultáneo: presentaciones y debates de temas de interés práctico y generalizado, una gran feria de empresas y cursos tutoriales de corta duración.
Durante el Simposio los participantes intercambiaron experiencias vividas, aprendieron de los lineamientos y desafíos que están sucediendo, y también debatieron sobre qué se espera de la implementación de las redes electroenergéticas inteligentes y acerca de los proyectos para las ciudades, sobre todo los de movilidad. En paralelo aconteció la II Reunión Cumbre CIER de CEO ́s y Altos Ejecutivos de la región de Latinoamérica y el Caribe, oportunidad en la que se congregaron las más altas autoridades del sector energético de la región.
TRANSFORMACIÓN GLOBAL DEL SECTOR ENERGÉTICO
“Podemos decir que en lo que va de este año la generación de energía eléctrica en el Uruguay fue un 56% de fuente hidráulica, 33% energía eólica, 6% biomasa, 3% fotovoltaica y un 2% de térmica con combustibles fósiles”, enfatizó Casaravilla. Destacó además que del total generado, el 22% fue exportado a dos mercados: 83% a la República Argentina y el restante 17% a Brasil. “Hay que redoblar la apuesta y seguir incorporando los mayores conocimientos y la mayor inteligencia, por ello el directorio de UTE tomó la decisión determinante de incorporar el 100% de medidores inteligentes”, agregó el titular de UTE.
“Cuando llegué a los primeros congresos de CIER, por el año 2011, me comentaron el tema de las famosas ‘tres R’, que significa que para que haya intercambios energéticos se necesitan recursos para intercambiar, redes en condiciones y reglas, que es lo más difícil de construir. Pero luego se sumó una cuarta, ya que para que ocurran las cosas se necesitan relaciones y yo agrego una quinta R, que es que además hoy tenemos la obligación de dar resultados. Podemos tener todo lo anterior pero necesitamos dar resultados y ahí se verá si la inteligencia la estamos poniendo al servicio de la gente, porque la energía eléctrica es un derecho”, finalizó diciendo Casaravilla.